Fuente: www.ctys.com.ar
Científicos de la Universidad Nacional de La Plata realizaron una adaptación nacional del sistema informático utilizado para la Televisión Digital Interactiva que desarrolló la Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro (PUC-Rio). Nahuel Garelli (Agencia CTyS) - Si a los televidentes que asistieron a la primera transmisión de televisión, el 17 de octubre 1951, se les hubiera dicho que 51 años después se crearía un programa que permite interactuar con la televisión, seguramente habrían creído que se trataba de  un relato de ciencia ficción. 

Pero el Laboratorio de Investigación y Formación en Informática Avanzada (LIFIA), de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata, concretó la idea al desarrollar el programa Ginga.ar a partir de una adaptación del software libre Ginga NCL, creado por la Telemidia Lab de la universidad PUC-Rio de Brasil, que permite implementar un sistema de televisión interactiva para la TV Digital Abierta (TDA).

“Ginga.ar es un software, que va incorporado al decodificador o dentro de una placa electrónica del televisor, capaz de procesar la información como archivos o pequeños programas que vienen junto a la señal de video y audio captados a través de la antena. De esta manera, Ginga.ar reconoce esa información y permite que el televidente pueda ejecutar las aplicaciones a través del control remoto e interactuar con el canal o el programa que está viendo”, explicó a la Agencia CTyS el director de LIFIA e investigador, Gabriel Baum.

A partir del software libre de los científicos brasileños, los investigadores argentinos corrigieron la versión de referencia del programa, para lo cual debieron optimizar el procesador de video, el uso de la memoria y la velocidad, además de separar las funciones mezcladas, entre otras reformas. 

El nombre del software proviene de un movimiento de la Capoeira, una danza que combina artes marciales y música, tomada como símbolo de la cultura, el arte y la lucha por la libertad y la igualdad de los esclavos africanos en Brasil. De esta manera, se realiza un paralelismo con la lucha por la democratización de los medios masivos de comunicación.

El programa tiene la capacidad de leer y comprender qué acción debe realizar según las indicaciones que se dan desde el control remoto. En el caso de Ginga, se encuentra dividido en dos subsistemas principales interrelacionados, Ginga-NCL y Ginga-J (para lenguaje Java), que permiten el desarrollo de aplicaciones siguiendo dos paradigmas diferentes.

Además, el laboratorio creó íntegramente el zapper ZaMba, una parte del programa que tiene como función la interacción directa con el televidente por medio del control remoto.

También se desarrollaron múltiples aplicaciones que se ejecutan desde el programa, como la posibilidad de obtener datos adicionales del programa emitido, juegos de ingenio y demás operaciones que brindan a los ciudadanos los medios necesarios para  tener  un mayor acceso a la información, educación a distancia y servicios sociales.

“La ventaja de desarrollar un software libre es que la sociedad  se apropia del conocimiento y no las corporaciones, por eso Ginga.ar tiene una orientación social y no un fin comercial. Además, desde el punto de vista técnico, es mejor porque muchas más personas pueden conocer, mejorar e intercambiar el código, permitiendo que se generen productos de mayor calidad”, comentó Baum.

En este sentido, se creo la comunidad Ginga con la intención de generar un espacio para que los usuarios participen, hagan consultas, compartan aplicaciones, propongan sugerencias y entre todos puedan construir la información que se ofrecerá en las pantallas de la televisión digital abierta.

El trabajo de LIFIA

Desde 2009, el laboratorio de informática perteneciente a la Universidad Nacional de La Plata comenzó a investigar y a desarrollar productos y servicios de software para TDA, entre los que se encuentra la adaptación de Ginga para la televisión interactiva. 

La iniciativa  surgió luego de un curso de capacitación que brindaron los investigadores brasileños en el país, tras un convenio firmado entre ambos gobiernos, cuando Argentina se dispuso a implementar la norma de la televisión digital. Asimismo, profesionales de la universidad PUC-Rio también colaboraron en la conformación de la primera versión del software nacional.

“Trabajamos mucho con la gente del Centro de Producción Audiovisual de la Universidad de Tres de Febrero, con Canal 7, Encuentro y productores independientes. Como no sabemos de producción de televisión, ellos nos daban las indicaciones de la información que tenía que aparecer en pantalla y nosotros hacíamos una aplicación para que pueda ser ejecutada por el programa”, contó Gabriel Baum.

El grupo de trabajo estuvo integrado por más de 20 personas, entre las que se encontraban ingenieros y estudiantes de informática. La próxima aplicación que se presentará en sociedad será una versión del Ginga.ar para las netbook que se entregan en el marco del programa “Conectar igualdad” que impulsa el gobierno nacional.