El proyecto se enmarca dentro de una línea mayor de investigación
que analiza los cambios nutricionales y sensoriales en productos
vegetales mínimanente procesados de la región del NEA que dirige la
doctora Sonia Sgroppo, directora del laboratorio de Tecnología Química y
Bromatología.
El estudio surgió a raíz de que en las provincias del Nordeste se
encuentra una gran variedad de frutos silvestres de los que se
desconocen sus características nutricionales, así como tampoco hay un
estudio sistemático acerca de sus contenidos en sustancias bioactivas y
su capacidad antioxidante.
Entre algunos de estos árboles se encuentran la guayaba, el guabiyú y la
mora, cuyos frutos silvestres son consumidos por una minoría en la zona
y que se destacan por su gusto. Algunos de ellos son muy apreciados en
otras regiones del mundo.
Así, en estos tres frutos se buscó determinar la capacidad antioxidante,
el contenido en azúcares, polifenoles y pigmentos. En guayaba y guabiyú
se cuantificaron los niveles de carotenoides totales y en moras, las
antocianinas. Para el estudio se trabajó con frutos de distintas
variedades y provenientes de distintos lugares de las provincias de
Corrientes y Chaco.
“De acuerdo a los resultados, se puede decir que los frutos de la
guayaba, guabiyú y mora de la región son buena fuente de compuestos
bioactivos y su consumo sería provechoso para la prevención de
enfermedades crónicas” explicaron a InfoUniversidades la doctora Sgroppo
y Maida Cedaro, alumna de la carrera de Bioquímica y becaria de
pre-grado.
Los compuestos fitoquímicos o bioactivos pueden definirse como
compuestos biológicamente activos presentes en alimentos vegetales que
tiene un efecto protector frente a enfermedades degenerativas en
humanos, por lo que su ingesta es beneficiosa para la salud. Por eso la
importancia que reviste poder caracterizar dichos componentes que,
además de asegurar la posibilidad del consumo, permite observar sus
cualidades beneficiosas para el organismo.
Cedaro explicó que se observaron diferencias en los frutos, sobre todo
en la guayaba y la mora, según los lugares de los cuales provenía, lo
cual podría estar relacionado con la influencia de variables climáticas y
del suelo.
Respecto de los resultados en detalle, el guabiyú presentó mayor valor
de azúcares totales, seguido de las moras y guayabas, y entre los frutos
de guayabas, las de color rojo son las que tienen un mayor contenido en
azúcares que las variedades blancas. También se encontró un mayor
porcentaje de azúcares reductores (glucosa y fructosa) en moras
comparadas con las guayabas.
El contenido de polifenoles totales fue mayor en mora, a la vez que las
guayabas mostraron un contenido superior al guabiyú. Los carotenoides
totales presentes en guayabas blancas fueron mayores que en la variedad
roja. Los mayores valores de antocianinas fueron para las moras de
Corrientes.
Por último, con respecto a la actividad antioxidante el estudio
determinó que la más alta actividad la mostraron los frutos de moras,
seguidos de guayaba y guabiyú. Se encontró una relación directa entre el
contenido de polifenoles y la capacidad antioxidante, es decir que los
frutos de mora tuvieron el mayor contenido en polifenoles y la más alta
actividad antioxidante.