Se trata de un dosificador de semillas capaz de distribuir los granos sobre el suelo a 15 kilómetros por hora, dos veces más rápido que los equipos que se utilizan comúnmente. El aparato, mecánico pero adaptable para funcionar en modo neumático, permite trabajar con materia prima seleccionada y sin clasificar.

Con el propósito de introducir un mecanismo de siembra alternativo a los existentes actualmente en el mercado del agro, un equipo de investigadores de la Facultad de Ciencias Agropecuarias ideó un dosificador de semillas de alta velocidad. El dispositivo, que sólo constituye una parte de la sembradora, cumple la función de tomar uno a uno los granos para luego depositarlos y distribuirlos sobre el suelo.

Entre las ventajas del producto desarrollado por los especialistas de la UNC, se destaca su rapidez. “Lo probamos con tres especies diferentes (soja, trigo y maíz) y observamos que trabaja perfectamente, incluso a velocidades exageradas, que rondan los 15 kilómetros por hora”, apunta Jorge Cosiansi, responsable del proyecto y titular de la cátedra de Maquinaria Agrícola.

Según el docente, los dosificadores comunes funcionan a siete kilómetros por hora, con la posibilidad de que la velocidad fluctúe de acuerdo a la orografía del terreno, es decir, las características del lugar. “En campos muy planos –ejemplifica– se puede sembrar a mayor velocidad, con poco rastrojo”.

Además de acelerar el proceso de distribución de las semillas, el aparato permite mayores alternativas de regulación del espaciamiento de la siembra, característica que cobra importancia actualmente, ya que el manejo genético de las plantas para obtener más rendimiento en la producción necesita mejor redistribución de las especies en el área.

Mecánico o neumático

El desarrollo de Cosiansi y su equipo de trabajo se basa en un producto similar, ideado hace aproximadamente 15 años por el entonces titular de la cátedra de Maquinaria Agrícola, Adriano Irico. El proyecto actual tomó ese modelo y, entre otras innovaciones, ideó un dosificador mecánico que permite el funcionamiento en modo neumático. “El mercado está cubierto por los dos sistemas. El neumático tiene un costo mayor porque es tecnológicamente más sofisticado, mientras que el mecánico es el más elegido por los productores debido a que presenta menos complicaciones, es más plástico, soporta mayores agresividades y puede utilizarse por grandes y pequeños agrarios”, señala el ingeniero.

En Argentina sólo una fábrica de este tipo de insumos produce el dosificador pero únicamente a pedido. Si bien todavía no se lanzó a la venta masivamente porque continúa en período de prueba, en la medida en que el dispositivo siga trabajando en óptimas condiciones como lo hizo hasta ahora en soja y trigo (se están ultimando las pruebas para maíz), estaría en condiciones de comercializarse. Asimismo, se están buscando los materiales y el proceso de fabricación que incidan en el abaratamiento del precio. “Este dosificador ha respondido muy bien tanto en el prototipo como en los primeros aprontes de fabricación. Queda por definir el costo de producción a gran escala y si se industrializará en una o en varias fábricas”, remarcó. A esas decisiones se suma la posibilidad de exportación, ya que desde el Mercosur impulsan programas que facilitan la venta de maquinaria agrícola, lo que “a la postre” terminaría de definir el precio final del producto.

Para productores locales

Otra particularidad que destaca al “dosificador de alta velocidad”, como lo llaman sus creadores, es que funciona para semillas clasificadas y sin seleccionar. Al respecto, Cosiansi indica que estaría reemplazando a un producto similar que ingresa desde el exterior, pero con la limitación de que requiere sólo granos clasificados. “Las condiciones reales de siembra de los productores locales hacen que, muchas veces, la semilla no cuente con ese procedimiento e, inclusive, reciba un tratamiento bastante agresivo. Por lo tanto, el dispositivo tiene que ser capaz de trabajar en ambos casos”, comenta.

Así, el desarrollo de Ciencias Agropecuarias atendería tanto las necesidades de los usuarios que se encuentran en los grandes centros de producción y trabajan con alta tecnología, como de los pequeños productores, quienes siembran y cosechan en condiciones más limitadas.

Sobre el proyecto

El dosificador de alta velocidad es un desarrollo de la Cátedra de Maquinaria Agrícola de la Facultad de Ciencias Agropecuarias que cuenta con el financiamiento de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UNC y una empresa privada de Santa Fe.

(Fuente: diario digital "Hoy la Universidad")