Comenzó el sexto año del Café Científico de la UNC organizado por la Secretaría de Ciencia y Tecnología. Como ya es costumbre, el Café propone un encuentro en algún sitio céntrico de la ciudad para conversar en torno a una temática científica. El 2014 arrancó con la presencia de Claudio Sánchez, un reconocido divulgador y habitual partícipe de actividades de popularización científica en universidades y medios de comunicación.
Sánchez participó del ciclo de Café 2013 con “Todo lo que sé de ciencia lo aprendí mirando Los Simpsons”. En esta ocasión fue el turno de ficciones más antiguas, y se centró en la obra del escritor británico del siglo XIX Lewis Carroll, autor de- en otras obras historias- Alicia en el país de las Maravillas.
¿Por qué Lewis Carroll? . Este escritor (su verdadero nombre era Charles Lutwidge Dodgson) fue y sigue siendo mas estudiado por su condición de filósofo y matemático, que por su obra literaria, a pesar de que Alicia…, su best seller, es reconocida en todo el mundo y fue llevada al cine más de una vez.
En realidad Carroll o Dodgson, fue matemático, especializado sobre todo en Geometría, y hasta llegó a enseñar en la Universidad de Oxford. Pero por sobre todas las cosas, era un hombre muy preocupado por los debates y problemas científicos, muchos de los cuales plasmó en su literatura fantástica.
El fenómeno conocido como “gravedad cero” o ingravidez, está presente en el comienzo de Alicia en el país de las maravillas, cuando la protagonista cae en una madriguera. La ingravidez se puede percibir en los momentos de “caída libre”, que aparenta la ausencia de gravedad pero en realidad es cuando la única fuerza que actúa es la propia gravitación. Es lo mismo que les ocurre a las personas que están dentro de un avión en caída, o lo que experimentan astronautas dentro de las naves espaciales. Otra forma de expresar es con el caso de una lata abierta que contiene líquido dentro y que al tirar por el aire, mientras dura el vuelo, el contenido se mantiene dentro del agujero. “La gravedad, que es la que normalmente haría caer el líquido, afecta por igual a este líquido y a la lata. Ambos caen juntos y entonces no hay razón para que uno caiga primero que otro”, explicó el expositor del Café Científico. La ingravidez también la enseña el futbolista Lionel Messi, cuando en una publicidad hace jueguitos con una lata de gaseosa abierta.
Lewis Carroll era muy consciente de este fenómeno, que profundizó en otro libro, menos conocido que "Alicia…", llamado Silvia y Bruno, y cuando uno de sus personajes intenta describir lo que pasaría si se intentara tomar una taza de té dentro de una habitación que está cayendo. Y la conclusión es la misma: mientras la habitación (o la lata de gaseosa) está cayendo por el aire, la gravedad no se aprecia. Lo mismo se explica con escenas de la película Apolo XIII, cuando la nave apaga los motores y comienza a caer; con escenas de la Pantera Rosa, o en un capítulo de Los Simpsons.
Las referencias a la gravedad aparecen en otro pasaje de Silvia y Bruno, cuando se inventa una alfombra que "anula" esta fuerza y flota libremente.
La obra de Carroll y su vinculación con la ciencia siguieron en las “Historias con nudos”, que el autor publicó en 1880. Eran cuentos en cuyos tramas había “anudados” acertijos o enigmas que implicaban algún razonamiento de tipo matemático sencillo y que el autor proponía que los lectores resuelvan. Por ejemplo el cálculo rápido de la velocidad de una caminata según sea en subida, bajada o de forma horizontal; o el llamado problema de “cambio de fecha”. Sánchez lo planteó con esta historia: “Supongamos que es martes a la medianoche en Londres. Al este de esta ciudad, en China por ejemplo, el miércoles ya llegó. Pero en el oeste, todavía no. Pero en alguna parte del planeta, además de Londres, tiene que haber algún lugar donde se esté produciendo el cambio de día. Y en ese lugar no es medianoche. Y además los días están en el orden contrario, un punto donde al oeste está el nuevo día y al este el viejo día. Lo que implica que las personas estando allí pasan de un martes a un lunes”.
Carroll, en el momento en que publicó este cuento, no conocía la solución, la cualque se formalizó unos años después de publicado estos cuentos con la instalación de la línea internacional del cambio de fecha en el meridiano 180. Este tema es la clave de la trama en la novela Vuelta al mundo en 80 días publicada en 1872, de Julio Verne, cuando el protagonista llega a su destino (Londres) y cree que, según sus cálculos, lo había hecho en el día 81, pero que al final, como inició el viaje por el este, descontó un día y finalizó justo a tiempo y ganó la apuesta.
El fenómeno de inversión en el “mundo del espejo” es otro de lo temas científicos planteados en la obra literaria de Carroll, especialmente en A través del espejo y lo que Alicia encontró allí, la secuela de "Alicia…. En la novela se aborda la cuestión de cómo, en forma precisa, se da la inversión de las cosas en la imagen que proyecta un espejo. ¿De derecha a izquierda? ¿De arriba a abajo?. En realidad, cuando se trata de cuerpos humanos, tiene que ver con la asimetría del cuerpo de la persona. Se entiende más claramente si se reflejan palabras, que dependen de la simetría de las letras.
El problema llegó también a la Química, con la inversión de los átomos de las moléculas. En Alicia…la protagonista se pregunta si la leche del espejo (que está invertida) es buena para beber. Y lo cierto es que no, porque la mayoría de las sustancias orgánicas tienen moléculas que no son simétricas, la distribución de sus átomos es asimétrica y por lo tanto cuando se invierten (o reflejan en el espejo) cambian, y es por ello que no se pueden digerir si estamos de “éste lado del espejo”.
El próximo Café Científico se realizará el 4 de julio, también en el Arrabal, contará con la presencia de otro expositor invitado especialmente: Gabriel Rabinovich, reciente Doctor Honoris Causa de la UNC, y con quien se hablará de los aportes más recientes de la Inmunología y las investigaciones sobre el cáncer.