Fuente: www.unc.edu.ar
Se trata de uno de los nuevos proyectos de la Incubadora de Empresas de la UNC. “Febo Asoma” es el nombre de la futura empresa de base tecnológica. Conversamos con la investigadora Julia Tügel, una de las impulsoras del emprendimiento.

Julia Tügel es docente investigadora de la UNC, y se presentó en la convocatoria Tecnoemprendedores del 2013 con una propuesta para comercializar dos productos que aprovecha la radiación solar como fuente de calor: la cocina solar parabólica y el calefón integral de alto rendimiento. Estos productos son particularmente beneficiosos para aquellos que no tienen acceso al gas natural, ya que les permite ahorrar, aunque pueden ser utilizados por cualquier persona que disponga de un lugar soleado.

Entrevistamos a Julia para que nos cuente sobre “Febo Asoma”, la empresa que lleva adelante junto a su familia.

¿En qué consiste la innovación de la propuesta?

El sistema de nuestros calefones solares tiene dos diferencias fundamentales con los otros sistemas que están actualmente en el mercado, y que disponen de un conjunto de captador de energía solar y tanque. Por un lado el tanque que almacena el agua es directamente expuesto a la radiación solar, por lo que ésta se transmite de manera muy eficiente al agua, y se ahorra también la energía necesaria para producir la circulación entre el captador y el tanque. La otra característica importante es que el volumen total (de 400 litros) se encuentra dividido en tres depósitos que se interconectan de manera tal que el tanque superior se encuentra a una temperatura media más elevada que el que le sigue. Esto permite, por un lado, una rápida recuperación de temperatura (en dos horas de radiación se alcanzan temperaturas de utilización en pleno invierno con temperatura ambiente bajo cero) y por el otro se evita que el agua fría que entra al sistema cuando una persona lo utiliza, se mezcle con el agua caliente y baje la temperatura del conjunto.


¿Por qué decidieron conformar una empresa?

Como docente e investigadora conozco la importancia que tiene el uso de las energías renovables para el desarrollo de nuestro país, no solamente desde lo ambiental sino también desde lo social. Sin embargo están poco difundidas en comparación con otros países y una de las diversas causas es que la tecnología que está en el mercado no logra satisfacer en grado suficiente las necesidades del usuario de nuestro país. Si los resultados de la investigación y del desarrollo no desembocan en un producto concreto a disposición de la sociedad, nos estamos quedando a la mitad del camino.
Nosotros disponemos de capacidad productiva derivada de actividades anteriores: herrería, refrigeración, tornería. La formación de Febo Asoma es nuestra oportunidad de convertir nuestra vocación por el desarrollo de las energías renovables en nuestro medio de vida y concentrar todas nuestras fuerzas en un único fin.

¿Qué valoración le das a la oportunidad que se les está brindando desde la UNC?

A partir de nuestra presentación en la Incubadora la idea comenzó a convertirse en realidad. La idea la tuvimos hace mucho tiempo pero por un lado siempre había tantas actividades de otra índole que no le dábamos el lugar que merecía. Por otra parte el paso de docente a emprendedor me parecía contradictorio, ya que nosotros estamos supuestamente para servir a la sociedad. Sin embargo creo que está ocurriendo un cambio de paradigma en la UNC, por supuesto a consecuencia de otros procesos que están ocurriendo a nivel nacional, que le da otro lugar al desarrollo de tecnología y su concreción a través de emprendimientos tecnológicos. Esto me ayudó a ver que era posible unir ambos intereses: el de nuestra familia y el de la sociedad.

¿Cuál es el aporte de la Incubadora de Empresas de  la UNC a tu proyecto?

Para nosotros lo más importante es tener un seguimiento, poder discutir los pasos que damos en este camino desconocido para nosotros con personas que se dedican a eso y también sentir el compromiso de cumplir con lo planeado, ya que las urgencias cotidianas tienden a ocupar el primer plano, en esta etapa que aun no vivimos del emprendimiento.
También aprendimos mucho de la parte que no es de nuestro ámbito como el del aspecto comercial, publicitario, la formulación de un plan de negocios, el flujo de caja,  etc. y vamos a continuar necesitando apoyo en este sentido. Además por supuesto la Incubadora nos abre puertas, nos brinda difusión y nos otorga mayor peso, tan importante a la hora de conseguir financiación. El aporte de la Incubadora es muy importante para poder convertir a Febo Asoma en una realidad.

¿Cuáles son las expectativas que tienen con el emprendimiento?

A corto plazo aspiramos a poder industrializar el calefón solar, cuyo prototipo utilizamos actualmente para nuestra familia de siete integrantes y que ha realmente mejorado nuestra calidad de vida. Esperamos poder trabajar unidos en familia y ganarnos la vida con algo que nos apasiona. A  más largo plazo apuntamos a ampliar el mercado de nuestros productos y generando fuentes de trabajo de calidad y aportar de esa manera al desarrollo regional sustentable y a la difusión de las energías renovables.