Durante la presentación de los resultados de la gestión del ministerio de Ciencia en 2013, el doctor Barañao anticipó los objetivos a futuro y destacó el Polo Científico Tecnológico que se está construyendo en la Universidad Nacional de La Matanza. El ministro de Ciencia de la Nación Lino Barañao problematizó que, actualmente, el 80 por ciento de la inversión científica del país está concentrada en cuatro ciudades y aseguró que “el desafío es generar no solo innovación productiva, sino también innovación inclusiva, creando cadenas de valor en regiones históricamente relegadas”.
En este sentido, ante los periodistas presentes para escuchar los resultados de la gestión del MinCyT en 2013, Barañao mencionó la importancia del Polo Científico Tecnológico que se está construyendo en la UNLaM.
“Este proyecto articulará el aporte de la Universidad, a través de la ingeniería electrónica y la medicina, con el hospital Alberto Balestrini, el hospital Garrahan, como así también el ministerio de Salud de la Nación, el ministerio de Salud de la Provincia y las cámaras de producción de insumos y de medicamentos”, enumeró.
Barañao consideró que “este proyecto no sólo tiene el valor de alcanzar mayor eficiencia en el traspaso del conocimiento biomédico a la producción química, sino a generar fuentes de trabajo para los egresados de dicha universidad que está en un entorno social que requiere de mayor empleo para mejorar la calidad de vida”.
Por otra parte, durante la presentación, el titular de la cartera de Ciencia mencionó que el presupuesto del MinCyT para el 2014 alcanzará los 4.963.173.549, un 20 por ciento más que en el año que finaliza. Asimismo, aumentará el financiamiento externo.
En 2013, se incorporaron 116 profesionales y técnicos de apoyo a la investigación argentina, con lo que se alcanzó un total de 7.907 investigadores y 2.367 profesionales y técnicos. Hace algunos meses, se alcanzó el número de mil científicos repatriados a través del programa RAÍCES.
Entre otros avances, este año se construyeron 7.125 m2 de infraestructura para la investigación, se inauguró la nueva sede de la Fundación Argentina de Nanotecnología y se generaron nuevas unidades de CONICET: entre ellas, el Centro Científico y Tecnológico Tandil y Centros de Investigaciones y Transferencia en Formosa, Chubut y Villa María.