Se llevó a cabo la presentación de las conclusiones del encuentro “El caso de la instalación de las plantas de celulosa en la margen izquierda del Río Uruguay”. El ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, participó del evento junto al rector de la Universidad Nacional de San Martín, Carlos Ruta. Asistieron también a la reunión el secretario de Políticas Universitarias, Daniel Malcolm, y el secretario de Educación, Juan Carlos Tedesco.

El titular de la cartera educativa nacional recordó que “en las universidades argentinas se concentra el 80 por ciento de la investigación del país”, y celebró esta oportunidad de “brindar un espacio para que científicos e investigadores puedan exponer su opinión sobre las problemáticas sociales, ambientales y económicas”.

Filmus consideró necesario “generar las condiciones para que las universidades tengan mayor participación en la toma de decisiones” respecto de temas que afectan no solo a la Argentina, sino a otros países de la región; y propuso “una vinculación directa con la Universidad de la República, de Montevideo, en este análisis de problemas que hacen a la calidad de vida de todos los ciudadanos”.

Miguel Ángel Blesa -codirector de la Maestría en Gestión Ambiental de esa casa de estudios- habló en representación de los profesionales que participaron del panel, y sostuvo que “ninguna tecnología es, en abstracto, mala o buena; todo depende de las condiciones y del lugar de emplazamiento, entre otros factores”.

Blesa señaló que durante las conversaciones se evaluó positivamente el alto grado de preocupación de la sociedad por este tema, “porque transforma una crisis en una oportunidad: es la oportunidad de tener condiciones básicas para el desarrollo sustentable, al tiempo que se establecen actividades productivas eficientemente controladas”.

El encuentro -del que participaron especialistas de la UNSAM, de otras universidades y centros de investigación nacionales, además de consultores del sector industrial y del Banco Mundial y una representante de la Defensoría del Pueblo- giró en torno a tres cuestiones: cómo la instalación de las papeleras afectará la calidad de aguas del Río Uruguay; cuál es el riesgo de accidentes químicos y cuáles sus posibles efectos ambientales; y qué incidencia tendrá el funcionamiento de las plantas de celulosa en la actividad turística.

El caso abrió el Foro Académico sobre Industrialización en Países en Desarrollo y Conservación del Ambiente, iniciativa de la Escuela de Posgrado de la UNSAM.

Fuente: htpp://www.me.gov.ar/spu