Fuente: UNNE
Pese a no ser el Nordeste Argentino un área de gran interés para el estudio en terreno de los periodos geológicos de mayor antigüedad, desde la región los investigadores de la UNNE aportan resultados inéditos en investigaciones de referencia a nivel nacional e internacional sobre la magnitud de eventos paleontológicos y geológicos en Sudamérica. La UNNE, a través del área de Ciencias de la Tierra (Departamento de Biología) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura y del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (CECOAL-CONICET-UNNE), ejecuta varias líneas de investigación tendientes a trazar relaciones entre formaciones geológicas y los posibles episodios de extinción y/o variación de la flora y la fauna en los periodos geológicos más importantes.

Dos proyectos en los cuales la UNNE ha logrado generar conocimiento nuevo y relevante a nivel país y región continental se sitúan en dos periodos de lo que no se conoce mucho tanto en Argentina y Sudamérica que son los periodos Pérmico-Triásico y Jurásico-Cretácico, claves en la historia de la tierra. En el Pérmico-Triásico se produjo la mayor extinción de flora y fauna, y en el Jurásico-Cretácico la transformación de los continentes y océanos, tal como los conocemos actualmente.

Pero qué implicancias e importancia revisten estos estudios. El paleontólogo Oscar F. Gallego, investigador de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNNE y del CECOAL, explicó que a nivel mundial cada vez resulta de mayor necesidad conocer cómo se fueron gestando las formaciones marinas y continentales. En los últimos años han cobrado especial interés los estudios de diversidad biótica del pasado y los efectos de las crisis sufridas por diferentes grupos de organismos, y su aplicación a los sucesos bióticos frutos de los cambios producidos por el hombre en los ecosistemas actuales.

La mayoría de los conocimientos generados corresponden a otras regiones del planeta, por lo cual Sudamérica requiere aún de mucho trabajo para conformar un registro lo más certero posible de su evolución geológica y biótica. Los trabajos científicos de la UNNE para el periodo Pérmico-Triásico arrojaron resultados de interés para Argentina, Brasil y otros países de la región, mientras que para el Jurásico-Cretácico se contribuyó al estudio de la reconstrucción ambiental del Jurásico continental de la Patagonia Argentina y primeros registros del sistema Cretácico.

Periodo de mayor extinción. Uno de los proyectos de la UNNE se sitúa entre los periodos Pérmico-Triásico. La crisis biótica ocurrida durante finales del período Pérmico y comienzos del Triásico fue una de las mayores extinciones de animales, plantas y otros organismos ocurridas en la historia de la Tierra. Involucró la desaparición del 90% de las especies y 60% de las familias de animales marinos y terrestres. Ocurrió entre 250 y 300 millones de años atrás.

Pero la mayoría de los estudios sobre esos periodos han aportado datos y conclusiones referidas a lo ocurrido en los ambientes marinos, y provienen de estudios realizados con faunas y floras de otros lugares del mundo, por lo que se desconoce sobre la magnitud de este episodio en Sudamérica.

“Los objetivos de este proyecto se centran en la búsqueda de evidencias que muestren como este evento afectó el registro fósil de invertebrados continentales y de algunas formas vegetales del Pérmico y Triásico de Argentina y Brasil” señaló el investigador.

En Argentina el registro de fósiles invertebrados es bastante bueno durante algunos periodos, escasos o ausentes en otros, y esos registros varían o presentan panoramas distintos en otras áreas de Sudamérica lo que abre el interrogante sobre la existencia de esas diferencias en la misma región.

Así, en las investigaciones se cuantifica la diversidad de taxones en el periodo Permo-Triásico para establecer los cambios en la diversidad (extinciones y apariciones) y proponer causas que expliquen estos cambios. El estudio se realiza en forma comparada involucrando las biotas continentales permo-triásicas de Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay y Brasil.

Resultados. Según el investigador, los estudios realizados en la UNNE permitieron hallazgos inéditos para Sudamérica. El proyecto, recuperó de la unidad geológica llamada Grupo Puesto Viejo ubicada en zona cordillerana en el sur de Mendoza una novedosa biota registrada geológicamente luego de este evento de extinción y que reflejaría una etapa de la recuperación pos-crisis que llevó a la cosmopolitización o distribución uniforme de la fauna y flora a nivel mundial.

“Los fósiles recuperados, crustáceos conchostracos y ostrácodos, junto a escamas de peces y las plantas confirman la hipótesis de uniformidad de la flora y fauna tras la extinción del Pérmico-Triásico, según datos cotejados con otros registros en el hemisferio norte y además de India, Sudáfrica y Australia” dijo Gallego.

Los resultados de ese proyecto constituyen además el primer registro de fósiles cercanos al límite Permo-Triásico, que evidencia un momento de unificación de la biota a nivel mundial.

Por otra parte, se determinó un incremento en la diversidad de invertebrados hallados en el Triásico Medio a Superior, lo que muestra una “instantánea” de la recuperación biótica post-extinción durante el límite Permo-Triásico.

“Son resultados realmente interesantes, porque además de ser datos novedosos permitirán avanzar en nuevas investigaciones para dilucidar lo ocurrido en el periodo Pérmico-Triásico y sus efectos en esta región” señaló el paleontólogo de la UNNE.

Periodo Jurasico-Cretacico. Otro periodo al que desde la UNNE en vínculo con otras instituciones científicas se ha aportado recientemente conocimiento relevante es el Jurásico-Cretácico.

Los períodos Jurásico (145 a 200 millones de años) y Cretácico (65 a 145 millones de años) son momentos fundamentales en la historia del planeta, en los que ocurrieron eventos geológicos que dieron paso al desmembramiento del supercontinente Pangea, evento que dispuso una nueva distribución de los océanos y continentes.

El Jurásico de la Patagonia Argentina es uno de los más importantes de América del Sur y del hemisferio sur, por su riqueza y diversidad de su fauna y flora fósil, además de brindar información sobre la evolución geológica y climática durante este período de tiempo geológico.

“Este nuevo ordenamiento produjo un fuerte impacto en las condiciones climáticas de los continentes junto con la aparición de nuevas barreras geográficas que influyeron sustancialmente en la evolución de la biota durante este periodo de tiempo” explicó Gallego, quien es codirector de un proyecto dirigido por la doctora Nora G. Cabaleri (Universidad de Buenos Aires), con estrecha colaboración del reconocido Dr. Wolfgang Volkheimer (experto alemán que se destacó en Argentina) ; y en el que participan universidades argentinas y brasileras con el objetivo de lograr la caracterización sedimentológica, isotópica, paleobiológica, paleobiogeoquímica, paleoambiental y paleoclimática de la transición del periodo Jurásico-Cretácico.

Ese grupo de investigación viene desarrollando desde hace años (década del 90) trabajos de relevamiento, mapeo y reconstruyendo la historia geológica y biológica de las rocas jurásicas de la Cuenca de Cañadón Asfalto en el centro de la Provincia del Chubut.

Algunos de los resultados de este grupo de investigación se refieren a cuál fue el tipo de formación y evolución de la Cuenca de Cañadón Asfalto que fue consecuencia secundaria de la apertura del Océano Atlántico. También se concretó la caracterización de ese ambiente, cambios en su flora y fauna consecuencia de esta evolución, y los cambios climáticos de un clima árido con poca presencia de estacionalidad hacia un clima fuertemente estacional para el Jurásico Superior.

Recientemente, el equipo de investigación incursionó en el Sistema Cretácico, resolviendo un problema emblemático en la geología argentina, como es determinar la edad cretácica temprana para la Formación Cañadón Calcáreo, momento crucial en la historia geológica de la Patagonia Argentina.

Ambos Proyectos. “En los distintos periodos, nuestros trabajos apuntaron a cubrir áreas vacantes y aportaron información trascendente para el conocimiento de estos periodos a nivel de Argentina y Sudamérica” señalo Gallego.

Lo importante es además que la participación de la UNNE en este tipo de proyectos posibilita a formación de nuevos recursos humanos que posteriormente se dediquen al estudio de las ciencias de la tierra y en particular de la paleontología, finalizó. A través de estos proyectos se formaron tres becarios de doctorado, cuatro de pregrado y cuatro becarios de tesis de grado.