La industria química no goza de buena fama pero a la hora de combinar estrategias de desarrollo y respeto al medio ambiente surgen en el mundo nuevas perspectivas y debates. Así es como en los últimos años logró imponerse el concepto de “Química verde”. Docentes de escuela media de todo el país se reunieron esta semana en la Universidad Nacional del Litoral (UNL) para participar del IV Taller Latinoamericano de Química Verde, que se realizó en la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la UNL.
“A veces se toma a la Química como la responsable de la contaminación del ambiente y otras veces se la ve como algo beneficioso. Este desarrollo nuevo de Química verde atiende a seguir produciendo, ayudando a la sociedad a mejorar la calida de vida y todos los beneficios que trae el desarrollo de productos y procesos de un modo amigable con el ambiente”, desarrolló Norma Nudelman, investigadora de la Universidad de Buenos Aires (UBA) e integrante de la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (ANCEFN).
La especialista destacó la necesidad de la búsqueda de un equilibrio de modo que la necesaria protección del medio ambiente no atente contra el desarrollo, una problemática que ocupa un lugar central en países como la Argentina.
“Los países del hemisferio norte que ya están desarrollados son los que imponen medidas muy estrictas gracias a las cuales nos venden sus productos”, analizó.
Nuevos debates
“Cuando yo iba a elegir carrera, se creía que la Química iba a resolver todos los problemas, era el tiempo en que el hombre llegó a la luna. Y después, de golpe, la Química se transformó en la responsable de todos los males”, narró Nudelman.
Pero frente a estas dicotomías, la investigadora plantea que “el equilibrio entre ambiente y desarrollo se logra con conocimiento”. Este fue uno de los motivos que la llevó a escribir el primer libro en español sobre lo que se llamó Química sustentable y que compiló el trabajo de especialistas de distintos países latinoamericanos.
En las aulas
El concepto de Química verde aún no cumple dos décadas, se trata de una forma novedosa de encarar las aplicaciones industriales de la disciplina. “Al escuchar esto por primera vez inmediatamente pensé que esto debía llegar rápidamente a Latinoamérica, porque nosotros necesitamos desarrollarnos pero de un modo sustentable”, contó Nudelman.
Según contó, en aquel momento se hablaba mucho de la protección del ambiente. “Estaba bastante concientizada la comunidad internacional con el tema”, recalcó.
Pero lograr un cambio implica mucho más que la creación de un concepto y su aceptación en los ámbitos académicos. “Es necesario que esto llegue a las aulas, a los jóvenes, porque esta es la Química del futuro”, aseguró.
Con este objetivo se dictan talleres de formación para docentes de nivel medio desde el año 2005 y, al respecto, la especialista destacó la buena respuesta por parte de los profesores a la propuesta.